la ciudad es mas pequeña de lo que crees

una sensacion de ser observaba invade a selene durante el retorno a su hogar. un par de pisadas la siguen muy de cerca. ¿imaginacion suya? ¿coinciden en el camino? ¿acosadores? aun faltaba mas de la mitad del trayecto, la noche ya reinaba el lugar y las calles estaban desoladas.

Escuchaba pasos de tras míos, “debería apresurar el paso” es lo primero que pensé mientras caminaba mas rápido de lo usual par poder llegar a mi destino, pero sentía que entre mas rápido caminaba mas rápidas eran aquellas pisadas.
Me detuve casi en seco mirando a mi alrededor pero ya por la oscuridad de la noche no me dejaba apreciar mucho de lo que había a mi alrededor.


Me arme de valor –quien anda ahí!- dije en voz clara pero no fuerte, fue una mala idea haberle negado que este chico me acompañara, volteaba para todos lados pero aun sin ninguna respuesta lo cual me provocaba miedo y frustración.

Por el momento era la líder e nuestra señora no podía demostrar debilidad ni miedo, “¿Qué pensarían nuestros seguidores?”

a punto de llegar a la posada vi como una chica con cabellera peculiar salia del lugar. pense durante unos segundos, ¿sera quien creo que es? no perdia nada intentando averiguar asi que comenze a seguirla. con agilidad y elegancia, subi al tejado de las casas del frente a su ubicacion y la segui sigilosamente. unas calles mas alla, un par de sujetos comenzaron a seguirla.
la chica los sintio e intento contactar con ellos pero se escondieron en un callejon antes de ser vistos, claramente eran acosadores. cuando la chica volvio a mirar hacia delante, baje rapidamente hacia ella y le toque el hombro.

"hola amiga, ¿como estas?" -pregunte hablando muy fuerte-.

"te estan acosando, disimula que me conoces" -agregue en un susurro para que solo ella me escuchara-.

Me asuste al ver a la chica, y me encontraba apunto de gritar asta que me hablo – este… si…- dije en voz baja y confundida mientras le seguía la corriente, caminamos un poco asta ue creí que ya habíamos perdido a aquellos chicos que ella menciono. Voltee ligeramente hacia atrás pero no podía ver nada y mucho menos escuchar, lo cual me hacia sentir un gran alivio.
Mire a la chica y le sonreí – gracias…- al momento de verla a sus ojos por alguna razón no veía nada era como ella…, no podía adentrarme a su mente había muy pocas personas las cuales no tenia acceso a ella, y por fin había encontrado una segunda persona.

- dime como puedo agradecerte de que me hallas ayudado- conteste un poco desconfiada ya que no savia si lo había echo con alguna buena intención.

resulto sencillo alejar aquellas ratas, bastaron un par de pasos simulando una charla para conseguirlo. cuando me agradecio el favor pude verla de frente y corroborar casi al 100% de quien era. insistio en compensarme la ayuda.

"no te preocupes, actos de buena voluntad escasean, pero este fue uno de ellos" -sonrei- "soy freya, ¿como te llamas?".

le extendi la mano.

Extendí mi mano así estrechándola con la mía, y le sonreí – hola.. mi nombre es Selene Ruthefort- dije en un tono claro pero aunque no lo pareciera aun inquieta ya que no podía ver absolutamente nada en su mente ni sus pensamientos “ la verdad si que era algo muy extraño”

A pesar de ello trataba de mostrarme fresca pero ya habían sido muchas emociones por este día necesitaba que me dejaran descansar por un segundo pero al parecer eso no seria posible.

- gracias por haberme ayudado… no estoy impuesta a andar en la cuidad sola… o con alguien.. y pues a horita no hubiera tenido ni una idea de cómo solucionar este inconveniente cualquier cosa que pueda hacer por ti la podría hacer con todo el gusto-

"no te preocupes, ya me has ayudado mas que suficiente" -sonrei satisfecha-.

asi que ella es selene. me encantaria interrogarla ahora mismo pero por la hora, no seria sano para ninguna de las dos.

"te cobrare la palabra, un dia de estos quiero una cita para que conversemos. tengo muchas preguntas que hacerte. ahora si me permites" -sin esperar una respuesta, la tome en brazos- "te ire a dejar para que nada te suceda, te quiero sana para nuestra charla".

brinque a una muralla y rebote a un poste de luz para llegar al tejado. comenze a correr dando trancos largos hasta llegar a la entrada principal de la sede de los cultistas.